Su vida, forjada en las minas desde temprana edad, le otorgó una fortaleza de guerrero, enfrentando las luchas desde los 7 años como si fueran auténticas batallas.
Su conexión con la naturaleza y la sabiduría de su padre se manifestaron en un momento especial cuando, antes de ingresar a la mina, un búho cruzó su camino. Su padre le enseñó que este ser alado era la viva representación del vigilante, con ojos abiertos perforando las sombras para descubrir a los que rondan en la oscuridad mientras el mundo duerme.
Con el tiempo y superando adversidades personales, Luis Carlos Parra Molina inició un proyecto empresarial extraordinario: Segurcol y Grupo Record. El búho, que presenció su infancia y lecciones de vida, se convirtió en la insignia de esta empresa, simbolizando la valía de luchar incansablemente por los sueños.
Hoy, recordamos con aprecio la visión y el coraje de nuestro fundador, cuyo legado vive en cada rincón de Segurcol y Grupo Record. Su historia es un recordatorio de que incluso en las circunstancias más difíciles, la perseverancia y la determinación pueden dar lugar a proyectos extraordinarios que perduran en el tiempo.